Mooji
Nosotros no 'tenemos' una vida, que son la vida misma, y al mismo tiempo somos el testimonio de la vida y todas sus expresiones que se desarrolla.

Reflexiona: si la vida es lo que tenemos entonces nos perdemos un día, por todas las posesiones no son permanentes. Tal creencia nos coloca automáticamente en la posición del cuerpo, que es limitada en el tiempo y perecedero.

Pero cuando llegamos a la comprensión de que somos la vida misma y luego todos los miedos se van, ya que este conocimiento nos coloca en la posición de la conciencia, que no tiene forma, intemporal e imperecedera.

La creencia de que no somos más que nuestros cuerpos nos hace ansioso y apresurado, porque en un nivel subconsciente nos impulsa a obtener lo más que pueda antes de todo termina. Este ha sido el trauma constante del ser humano a lo largo de los siglos. Sin embargo, como la conciencia misma, no estamos limitados en el tiempo. Nuestra mente y el mundo se convierte en una existencia más sabio y más pacífico, porque sabemos en nuestros corazones que somos lo eterno.