Dios o dios?
Creo que todos alguna vez en nuestras vidas nos hemos
preguntado qué es Dios?, y al no tener las herramientas cognoscitivas que nos
permitan abrir la mente de forma ilimitada, no nos ha quedado más que recurrir
aquello que damos por verdadero pues cuando empezamos a tener uso de razón ya
estaba establecido.
Junto a todo lo establecido viene el famoso “cuestionar lo
divino es pecado”, como si quienes se arrogan el papel de intermediarios de
Dios fueran arcángeles mensajeros o que se yo, es por ahí donde va la trampa, la
educación del ser humano debe contemplar el sano ejercicio de la duda a todo
desde una sana y legitima intención de obtener el máximo de información posible
para poder discernir lo que nos sirve para nuestra evolución y elevación y
aquello que está ahí solo para obstaculizar este derecho.
No me atrevo hacer una definición de Dios, pues siempre lo
he concebido como una gran fuente indescifrable, omnipotente y omnisciente por
lo tanto indescriptible a nuestras mentes por lo menos desde este plano de
existencia. Teniendo claro que el amor es su energía creadora de allí inicia y
termina sin comienzo ni fin la creación.
Pero debemos tener en claro que es dios, y nos podemos dar
cuenta que representa la antítesis del amor aunque es tan grande su astucia que
muchas veces o más bien siempre se ha disfrazado de amor para engañar, engaño del que no somos inocentes e ignorantes
de buena y mala fe. Un dios que justifica la muerte, la guerra que no son más
que sacrificios de carne y sangre tal y cual como se hacía en tiempos pasados,
ahora se han sofisticado un poco más, pues siempre ha habido guerras
financiadas por grupos encargados directamente por ese dios de anarquizar el
mundo. El mundo patas arriba en el que vivimos, hemos permitido por pereza
espiritual e intelectual, que nos cuelen un dios de venganza, castigo y que además
pide dinero, es más manda a que sus fieles busquen la riqueza material a toda
cuesta como objetivo más elevado en muestra a su fe.
En algún momento de nuestra vida se debe efectuar el
despertar de nuestra conciencia, que no es otra cosa que darnos cuenta que el
sueño es muy pesado para ser verdad o por lo menos la única verdad, que en
nuestra historia siempre se repite las mismas escenas, guerras, epidemias,
hambre, gobiernos que lo tienen todo y pueblos que no tienen nada pero pregonan
igualdad.
Podemos aceptar sin
cuestionar que esta es la única realidad o nos atreveremos a iniciar la búsqueda
de que hay más allá de esta película llamada vida que se repite en secuencias
interminables?
RA
No hay comentarios:
Publicar un comentario