El lado nuestro que no conocemos

Una de las cosas más laboriosas en esta espera, es ir lidiando con todas las cosas que se te van presentando en el día a día y no tener consciencia que aquello, no es más que la repetición una y otra vez de esa parte no laborada que llevamos internamente.  Es increíble como caemos una y otra vez en la manifestación de nuestra sombra, como dicen los eruditos en estos temas; tenemos luz y oscuridad, un lobo blanco y uno negro, ángeles y demonios, ying y yang etc., nuestro error estriba en no ser conscientes de ambos lados porque inicialmente nos enseñan o nos educan para aceptar solo nuestra parte buena.

Es justo aquí donde quiero presentar al Señor Oculto, tiene existencia dentro de nosotros y lo mejor es que es parte de nosotros porque lo alimentamos a diario, nos habla, nos aconseja y se manifiesta de manera libre cuando así tiene por conveniente. Él es parte integral es ese lado a donde no queremos ver, por supuesto que hay quienes lo tienen más desarrollado y le dan rienda suelta.

Alimentamos ese lado cuando nos embarcamos en esa narrativa retórica de porque queremos esto y porque no queremos aquello, o cuando despotricamos contra cualquier persona a quien no conocemos pero ya hemos hecho la tarea de emitir nuestra opinión, y de creer que nuestra opinión es la verdad; en ese momento se forma un remolino de frases en nuestra cabeza sin ninguna lógica solo guiadas por la emocionalidad del momento, es cuando el Señor Oculto está en plena cena, porque la cosa no termina allí pues de ahí vamos salpicando lodo con ventilador sin detenernos a pensar ¿Qué estamos haciendo?, ¿de qué pensamiento nos estamos alimentando y qué energías estamos creando?;  lógicamente pronto veremos las consecuencias de no ser conscientes, o mejor dicho pronto tendremos que disfrutar de forma amarga nuestra creación.

Existe literatura abundante sobre el tratamiento que se debe dar al Señor Oculto en este caso, obviamente desde la ortodoxia creencias se debe rechazar, algunos que pretenden ser más espirituales y más abiertos mentalmente recomiendan una seria de ritos y mantras de más métodos que te harán combatir ese lado oscuro, yo recurro a mis propias experiencias y lo que a mí me ha funcionado.

Había analizado esto del Señor Oculto con aquello que me estaba pasando en estos días sobre la doble personalidad que llevamos a cuesta, hasta entonces no había caído en consciencia lo profundo que esto nos afecta; o por lo menos a mí me ha afectado. La capacidad de autodestrucción que tiene aquello que los entendidos y eruditos llaman La Sombra, esa capacidad de destrucción y auto sabotaje que nos impide salir de la caja de pensamientos pues siempre estamos siendo empujados a transitar el camino seguro o zona de comodidad.....

Fragmento del libro "Mientras Esperas"